domingo, 28 de octubre de 2012

A moment I treasure

Un año atrás exactamente, a estas horas de la noche, me estaba pasando una de las cosas más lindas que tuve la suerte de vivir en mis cortos 17 años de vida: estaba en un recital de Aerosmith, en campo por primera vez, con una lluvia copiosa que caía sobre nuestras cabezas, abrazada a mi mejor amiga.

Fue mi primera experiencia en campo, y con esta banda… Y espero que no sea la última. Aparte del despliegue musical y la energía de la banda, estaría bueno agregar la buena voluntad de Tyler, ya que pocos días atrás había sufrido un “accidente” en el hotel; misteriosamente se cayó, se rompió la trompa, se rompió un diente y le quedó un ojito negro. Mirá si este chabón se iba a tirar para atrás; el show fue emocionante, largo, único, y el simple hecho que haya estado lloviendo, le dio un toque de magia único, en el que las gotas de lluvia se confundirían con las lágrimas que surgían de mis ojos.
Acá no contó sólo lo que fue el recital en sí; la previa de pasar la noche en la casa de mi mejor amiga (en un día de semana), haberme creado el twitter con ella, hablar, la experiencia de ir hasta La Plata, habernos encontrado con otra amiga… Fue genial. Además de disfrutar un show de puta madre, afiancé el vínculo con una de las personas más importantes en mi vida: mi mejor amiga.

Que se repita.

2 comentarios:

  1. Hay algo mal en la info, fueron 2 dientes, no uno solo, es insignificante pero no esta demás jeje. Gran show!

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  2. qué felicidad boludaaaaaaaa, te acordás!!!!???? qué ganas de volver. inexplicable lo que te amooo. nuestra amistad se afianza todos los días bebé.

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